Los últimos informes indican que Kelly Kelly fue la primera en no querer renovar contrato con la WWE. Durante los últimos meses, Kelly Kelly ha estado firmando acuerdos externos con otras compañías de cara a finales de 2012 y 2013, cosa que no sentó muy bien a la gestión de la empresa. WWE ofreció un contrato de renovación a Kelly Kelly pero ambas partes no llegaron a un acuerdos.